viernes, diciembre 28, 2007

Esos "finales" oscuros...

Acabo de ver en DVD (por cortesía de mi hermana) la película del pingüino que baila tap, esa de Happy Feet, y por un momento me hizo sentir mal y pensar "¡Puta! que final tan miserable y triste" momentos después de que el narrador dice algo así como:

- Pasaron tres días para que perdiera la voz. Pasaron tres meses para que perdiera la cordura.

Entonces vemos al pobre animal alucinando con la imagen de su familia y amigos sobre un muro pintado que asemeja su hábitat, momentos antes de que la cámara salga haciendo un zoom out desde el acuario hacia el espacio... fade a negros.

¿Fin? Claro que no, la imagen regresa y la película termina en un colosal baile de pingüinos y destapándose como una propaganda ecologista.

Creo que me quedare con mi final.

Así como de igual forma paso con Inteligencia Artificial, justo cuando el vehículo anfibio donde viajan David y Teddy es atrapado "para siempre" debajo de la pesada estructura de una rueda de la fortuna en el fondo del mar...

4 comentarios:

El oso dijo...

pues aun no eh visto la movie, pero ya lo comentarmos, felicidades por el cambio, se ve muy bien tu blog, y lo seguire muy de cerca, un abrazo navideño y de fin de año, estamos en contacto... bye Tovarich

LIZA dijo...

Pues yo tampoco la he visto, pero me hiciste recordar la última película que me hizo llorar "Mundo de Tharabithia" fué un final triste muy triste...y bueno aqui te estaré visitando, V, que tengas un gran comienzo de año, un abrazooooo.

W. dijo...

Señor !

Me da gusto mirarlo por estos lares. El tema de los finales me gusta, pero creo que siempre son muy subjetivos. Todo depende de los gustos.

A gente como nosotros nos gustan los finales raros, oscuros, o de plano incomprensibles. Pero hay mucha gente que le gustan los finales light. No los critico. Sólo digo que el gusto se rompe en géneros.

Repito; buen tema.

Nos seguimos leyendo.

Anónimo dijo...

Que bueno verte por acá porque francamente batallaba un poco más cuando te sintonizaba en el otro blog.
saludos